
Rompeolas flotantes
Rompeolas flotantes
Los espigones tradicionales generalmente se construyen con grandes masas de hormigón o rocas que se depositan sobre el fondo marino y alcanzan la superficie -por lo que se excluye su uso en aguas profundas-, lo cual los convierte en instalaciones rígidas y permanentes. Desde el año 1980, la idea de superar estas limitaciones a través de soluciones más flexibles y económicas ha conducido a INGEMAR a buscar otras opciones empleando estructuras flotantes cada vez más eficientes y fiables.
Por nuestra propia experiencia, su instalación resulta adecuada para áreas sometidas a un oleaje contenido y breve, como el de lagos, antepuertos y áreas protegidas, donde se pueden aprovechar las ventajas de la creación de barreras relativamente económicas, independientes de la profundidad y de los cambios de nivel de las aguas.
El rompeolas tipo FCA es el resultado de la experiencia adquirida por INGEMAR durante 40 años de estudio y aplicaciones en el campo de los muros de escollera. Están fabricados de elementos prefabricados de hormigón armado con un núcleo de poliestireno expandido de dimensiones significativas y con una gran capacidad de desplazamiento, de modo que, unidos en serie y/o en paralelo, permiten construir barreras flotantes con unas características de fiabilidad, robustez y durabilidad comparables a las de las obras fijas tradicionales. Cada tipo de rompeolas Ingemar es objeto de pruebas y ensayos en canal y tanque en el Laboratorio de construcciones marítimas de la universidad de Pádova.
Hasta la fecha, el rompeolas de 360 m instalado en el puerto de La Spezia, con su anchura de 10 metros y su altura total de 2,40 m, constituye la estructura con mejores prestaciones de la producción de serie de rompeolas flotantes en el ámbito internacional.